Diez trabajos de diagnosis que pueden sorprender.

Ahora que los coches son prácticamente ordenadores sobre ruedas, es posible que las piezas que antes se desmontaban y volvían a montarse sin más requieran una reprogramación o adaptación tras montarlas. Si no se usa una herramienta de diagnosis compatible para determinar el comportamiento de la nueva pieza, el vehículo puede presentar el mismo fallo que antes, generar un fallo completamente nuevo o, simplemente, no funcionar como debería, ya sea con emisiones más altas, menor ahorro de combustible, rendimiento deficiente del motor o menor seguridad. En cualquier caso, lo más probable es que el taller reciba de nuevo la visita de un cliente insatisfecho, lo que supone una pérdida de tiempo, dinero y, probablemente, de reputación.

Así que, para evitar situaciones no deseadas, ofrecemos una lista con las 10 tareas de diagnosis que pueden sorprender incluso a los técnicos más experimentados:

1. Al instalar un nuevo filtro de aire en algunos vehículos diésel o gasolina Mercedes-Benz, por ejemplo, se requiere el uso de una herramienta de diagnosis compatible para decirle a la ECU que se ha sustituido y de este modo, adapta las lecturas y parámetros del sensor MAF para asegurar la medición correcta del flujo de aire.
2. La sustitución de una nueva batería con tecnología Start & Stop, puede llevar bastante más tiempo que la de una batería convencional, ya que es necesario reprogramar el sistema de gestión de la energía del vehículo con un equipo de diagnosis compatible. Si no se realiza esta operación, es posible que el sistema Start & Stop no funcione correctamente, con el consiguiente aumento del consumo de combustible y otros problemas asociados.
3. Tras sustituir una válvula EGR, por ejemplo, la válvula debe ser readaptada o de lo contrario puede causar repetidos fallos en diversos sistemas del vehículo y, potencialmente, daños graves en el motor.
4. Al instalar amortiguadores de suspensión neumática en algunos modelos debe realizarse un proceso de diagnosis en tres etapas. Si no se llevan a cabo estos pasos exactos, en el orden correcto, puede ocurrir que el coche se note desestabilizado a diferentes alturas, de delante a atrás o de lado a lado, después de la sustitución.
5. La sustitución del parabrisas ya no es una tarea sencilla. En los vehículos equipados con sistemas avanzados de asistencia al conductor, conocidos como ADAS, los técnicos tendrán que realizar una calibración estática o dinámica para garantizar que estos sistemas críticos para la seguridad siguen funcionando correctamente.
6. Cuando se sustituyen sensores del árbol de levas, que miden tanto la velocidad como la posición y sincronización del motor, se requiere un procedimiento de diagnosis para borrar los valores del sensor antiguo y poner la ECU en modo de aprendizaje para el nuevo sensor. Sin esto, pueden experimentarse diversos síntomas que afectan directamente al funcionamiento correcto del motor.
7. Incluso algo tan sencillo como un cambio básico de aceite y filtro puede requerir ahora el uso de equipos de diagnosis. En la actualidad, en la gran mayoría de marcas y modelos de vehículos, la ECU debe reiniciarse para reflejar los valores de "calidad del aceite", fecha de próxima sustitución, etc...
8. Al cambiar el líquido de frenos en un sistema ABS controlado electrónicamente, se requiere el uso de una herramienta de diagnosis compatible para iniciar una rutina en la ECU del ABS. Al abrir y cerrar rápidamente las válvulas durante el proceso de purgado, se asegura que el aire se extrae del conjunto modulador. Sin ello, los frenos no funcionarán correctamente, con el riesgo extremo que eso conlleva.
9. Exclusivamente para conservar la garantía de algunos vehículos eléctricos, es necesario realizar una comprobación del estado de la batería con un equipo de diagnosis compatible. Esto medirá el estado de la batería celda por celda, para determinar cuánta vida útil de servicio le queda y poder detectar posibles averías y faltas de rendimiento del vehículo.
10. Al montar un nuevo brazo de control y/o suspensión en un vehículo equipado con faros autonivelantes, el sensor de altura y los propios faros, deben reajustarse utilizando una herramienta de diagnosis compatible que pueda escanear y ajustar para garantizar que los faros estén siempre a la altura adecuada para el vehículo. De lo contrario, el vehículo podría rodar con las luces incorrectamente reguladas, lo que reduciría la visibilidad correcta del conductor y molestaría a los vehículos que circulan en sentido contrario.

Estos son solo algunos ejemplos de entre muchos más. De hecho, para hacernos una idea de cuántos hay, basta con comprobar el software de diagnosis DS de Delphi Technologies: solo para turismos y vehículos comerciales ligeros, cubre más de 4.400 tipos de motor diferentes que requieren adaptación o reprogramación para sensores y actuadores; más de 1.600 para sondas de temperatura de escape; 2.400 para sondas Lambda y 11.500 para EGR y mariposas EGR. Así pues, no es de extrañar que a algunos técnicos puedan quedar sorprendidos con la capacidad operativa de nuestro Software de diagnosis.

Con nuestra solución de diagnosis BlueTech, gracias a nuestra experiencia en tecnologías pioneras de propulsión, estas innovadoras herramientas ofrecen la posibilidad de una diagnosis avanzada para ver y grabar datos en tiempo real, realizar numerosas funciones especiales en una amplia gama de vehículos: 64 marcas y más de 1.180 modelos y 30.750 selecciones únicas de sistemas para turismos y vehículos comerciales ligeros, y 74 marcas y más de 680 modelos y 16.600 selecciones de sistemas para camiones, remolques y autobuses. Además, cubre más del 80 % del parque general de vehículos eléctricos.

Por ello, tanto si se trata de un trabajo rutinario como de un servicio de diagnosis complejo, la respuesta es la solución de diagnosis DS BlueTech de Delphi Technologies.